Acciones de Facebook caen de los USD$30:
La espiral descendente de Facebook no se detiene, y en medio de la incertidumbre sobre qué es lo que pasa con la red social en la bolsa, las acciones de la compañía retrocedieron por debajo de los USD$30, quedando un 20% más baratas del precio inicial de venta cuando debutó la firma en Wall Street hace dos semanas. Esto significa que todos los que compraron acciones los primeros días han perdido dinero.
Las acciones mostraban un retroceso de 9,34% al momento de escribir esta nota, ubicándose en los USD$28,9 en el Nasdaq. Inicialmente se pusieron a la venta en USD$38 el 18 de mayo pasado.
La caída del precio comenzó a medida que empezaron a crecer las preocupaciones sobre las posibilidades reales que tiene la compañía para generar ganancias, que aparentemente son más débiles de lo que se pensó inicialmente.
Los pronósticos más pesimistas señalan que las acciones todavía podrían bajar hasta USD$25 en julio, mientras algunos incluso dicen que el retroceso llegaría incluso a los USD$16 para diciembre.
El problema para Facebook es que hay incertidumbre sobre su futuro, y posiblemente desconfianza, dos factores que impulsan a la baja las acciones de cualquier compañía. La red social, además, no puede salir a hablar para tratar de dar seguridad a los inversionistas, puesto que está obligada por ley a quedarse en silencio durante 40 días después de la oferta pública inicial.
Más allá de los múltiples problemas que tenía Boo.com para funcionar como empresa, su reventón fue una “llamada de atención” a los inversionistas, que empezaron a darse cuenta de la burbuja y de que, pese a la popularidad que tenga una compañía, si no puede generar ingresos, no funcionará.
Así, los problemas de Facebook parecen estar reflejándose en las acciones de otras compañías en internet. Las acciones de Zynga han bajado sostenidamente desde que la red social entró a la bolsa, situándose hoy en torno a los USD$6 respecto a los USD$8 que costaban el 18 de mayo. La evolución de Groupon ha sido algo más accidentada, pero también muestra una baja, lo mismo que Yelp, lo que podría reflejar una desconfianza más general sobre el futuro de este tipo de empresas.
Todavía es muy temprano para sacar conclusiones, pero está claro que la situación de Facebook dará que hablar por bastante tiempo.
La espiral descendente de Facebook no se detiene, y en medio de la incertidumbre sobre qué es lo que pasa con la red social en la bolsa, las acciones de la compañía retrocedieron por debajo de los USD$30, quedando un 20% más baratas del precio inicial de venta cuando debutó la firma en Wall Street hace dos semanas. Esto significa que todos los que compraron acciones los primeros días han perdido dinero.
Las acciones mostraban un retroceso de 9,34% al momento de escribir esta nota, ubicándose en los USD$28,9 en el Nasdaq. Inicialmente se pusieron a la venta en USD$38 el 18 de mayo pasado.
La caída del precio comenzó a medida que empezaron a crecer las preocupaciones sobre las posibilidades reales que tiene la compañía para generar ganancias, que aparentemente son más débiles de lo que se pensó inicialmente.
Los pronósticos más pesimistas señalan que las acciones todavía podrían bajar hasta USD$25 en julio, mientras algunos incluso dicen que el retroceso llegaría incluso a los USD$16 para diciembre.
El problema para Facebook es que hay incertidumbre sobre su futuro, y posiblemente desconfianza, dos factores que impulsan a la baja las acciones de cualquier compañía. La red social, además, no puede salir a hablar para tratar de dar seguridad a los inversionistas, puesto que está obligada por ley a quedarse en silencio durante 40 días después de la oferta pública inicial.
Efecto dominó
Algunos han comparado el desastre bursátil de Facebook con lo que ocurrió en la década del 2000 con Boo.com, sindicada como uno de los mayores ejemplos de reventón .com. El sitio fue lanzado en 1998 con la idea de vender ropa por internet. Antes de haber vendido una sola prenda, ya se había gastado USD$125 millones en implementar su plan, sin generar ingresos.Más allá de los múltiples problemas que tenía Boo.com para funcionar como empresa, su reventón fue una “llamada de atención” a los inversionistas, que empezaron a darse cuenta de la burbuja y de que, pese a la popularidad que tenga una compañía, si no puede generar ingresos, no funcionará.
Así, los problemas de Facebook parecen estar reflejándose en las acciones de otras compañías en internet. Las acciones de Zynga han bajado sostenidamente desde que la red social entró a la bolsa, situándose hoy en torno a los USD$6 respecto a los USD$8 que costaban el 18 de mayo. La evolución de Groupon ha sido algo más accidentada, pero también muestra una baja, lo mismo que Yelp, lo que podría reflejar una desconfianza más general sobre el futuro de este tipo de empresas.
Todavía es muy temprano para sacar conclusiones, pero está claro que la situación de Facebook dará que hablar por bastante tiempo.
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